Y mientras volcaba sobre la pileta de la cocina el contenido restante de vino picado de la botella, una ráfaga de pensamiento se me vino a la cabeza, un loco recuerdo que andá a saber adonde lo tenía guardado. Hasta hace unos pocos años, mi padre venía a saludarme después de beber vino y yo no aguantaba su aliento, se me antojaba una sensación asquerosa y repugnante. ¡Qué asco!, le decía. Aún recuerdo los manteles con manchas violáceas y mi olfato descontento.
Ahora a los veintiocho, no puedo concebir un asado dominguero sino va de la mano de un tinto. Me interesa saber de cepas, investigo el estacionamiento de la uva e incursiono a través de bodegas.
Esto se repitió con la manteca, con la leche y con el arroz.
Ahora a los veintiocho, no puedo concebir un asado dominguero sino va de la mano de un tinto. Me interesa saber de cepas, investigo el estacionamiento de la uva e incursiono a través de bodegas.
Esto se repitió con la manteca, con la leche y con el arroz.
¿Por qué la idea antes que la experiencia?
Ideas previas. Ideas malditas que me pesan como la carga de un camello. Ideas que me condicionan, me atan, me angustian, me oprimen, me sofocan. No las quiero. Me las quito como la ropa para dejar que el aire me acaricie la piel. No tengo miedo de sentir. No tengo miedo ni pudor. Mi cuerpo es un volcán. El cuerpo es más sabio que la mente. Todo lo que en él toma cauce, me nutre desde los pies como la savia. Todo aquello que lo atraviesa lo aprehenderé. Mis ideas no me sirven más que para tapar. Soy un carozo oculto detrás de numerosas y espesas capas de razones equivocadas. Ansío despojarme de todo. Así me conduciré a la libertad. La libertad no son las ideas. Libre es mi ello librándose de una mordaza que aplasta. Si la forma de ser humano es ser un concepto entonces me inventaré otra forma de ser. Me estoy perdiendo de algo más trascendente. La experiencia de experimentar me urge. Me incomoda ser un rayo que fluctúa y se tambalea entre la percepción y la conciencia. Pues si esa es mi naturaleza, exijo volver a nacer.
7 comentarios:
Tratare de responder su pregunta lo mejor que pueda... recuerde que solo curse hasta 2do año...
La idea es aquello que mantiene la mente conciente, es aquello que le abre paso a la razon, el conocimiento, la creatividad, la inteligencia, el deseo y muchas cosas mas que seguro estoy olvidando. Sin las ideas la experiencia queda en la nada misma, completamente intrascendente, la idea es ese oido anonimo que oye un arbol caer en el medio del bosque y puede certificar que efectivamente a caido, la imagen es efimera, la idea es eterna... Cogito ergo sum.
Da para rato esto, si le interesa seguir, aviseme.
Saludos.
pd: ¿Esta cambiando el estilo del blog?
ufff (con tres efes).
volviste, loca, me pasaré seguido entonces, saludos desde el chuiquero
Primera vez por tu termo, me gustò y volverè, te espero por el mio, besos
La idea antes de la experiencia es la intuicion de las cosas correctas, una lastima que a veces se pierda.
Mucho bien no le ha hecho el tinto al mundo, aunque a todos nos gusta.
un abrazo!
Thotila:
Sin la idea nada tendría nombre ni podría ser recordado ni modificado ni repetido. Eso está claro. La conciencia es uno de los estados de la psiquis, pero por un rato, no quiero mente, ni pensamiento ni nombres ni etiquetas. Vivenciar a través del cuerpo primero y después pasar a la teorización, es lo que intento decir... lo más valioso es eso.
Abrazos!
Fulano: golpe bajo ese...
Cerdito: Pase cuando quiera, ya me daré una vuelta por su chiquero!
Zorra: Bienvenida! ahí voy...
Karma: lo intuición lo es todo, si la escucharamos más atentamente y el vino es bueno para el corazón...
Si estimada, entendi lo que quizo decir, es un planteo muy interesante el que usted hace, por eso puse "si quiere seguir aviseme", ahora, para mi, es mas valiosa la experiencia, acompañada de la idea, ya que sin esta ultima, la experiencia se pierde en la nada.
Saludos
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